Desde hace unos meses estoy viendo “7
Vidas” una serie que empezó en 1999. Son de ese año los capítulos
los que veo ahora. En el 2x10 se trata el tema de la conciencia
colectiva y el trabajo precario en España.
El hilo conductor del tema es que
Carlota descubre que un vestido que se ha comprado esta producido en
una fábrica ilegal con chinos explotados.
A lo largo del capitulo la
“conciencia” de Carlota, que son sus cuatro compañeros de
reparto dentro de su cerebro, disputan acerca de si deben dormir o no
dormir y de como deben solucionar esta cuestión en el caso de
decidir no seguir descansando. Finalmente, de una manera cómica,
deciden que Carlota debe denunciar a la fábrica ilegal y así que
esos “pobres” chinos no sigan siendo explotados.
El chino, al que anteriormente había
conocido, se cabrea con Carlota, y Sole, la mujer de las collejas,
termina dándole una charla a Carlota sobre el sistema capitalista y
lo difícil que sería llevar a cabo el ideario idealista, me
rebuzno, de luchar contra la explotación laboral en todos sus
aspectos.
Y ¿Por qué os cuento esto?
Muy fácil.
Este capitulo es de hace 15 años, y
los chistes y temas tratados a lo largo de los 50 minutos cabrían
perfectamente en el guión de una serie actual. Es decir, por mucho
que nos hemos dado cuenta de que hay problemas en el sistema, por
mucho que hemos sabido que las cosas van mal, y por mucho que hayamos
hecho chistes y hablado públicamente de estos problemas, no ha
servido de nada.
Por que hablar y hacer chistes no ayuda
si detrás de estos chistes no hay acciones reales. Y probablemente
dentro de 15 años veamos un capitulo de cualquier serie actual o
algún programa suelto del Gran Wyoming y las cosas seguirán
exactamente allí donde las dejamos hace veinte años y donde
envejecerán dentro de otras 7 vidas.
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