martes, 1 de abril de 2014

La sanidad no rentable que todo el mundo quiere gestionar

            Hoy iba en coche por mi ciudad, Elche. Un autobús urbano iba delante de mi y he podido ojear la publicidad que este llevaba en la parte trasera del vehículo. En este caso una representación de opera “Turandor de Puccini”, bueno eso era la mitad del cartel, la otra mitad decía: “Con el patrocinio del Hospital del Vinalopó”. Al leer eso, ahí, en grande, con el logo y todo, ha sido cuando el bus ha decidido parar en su respectiva parada y yo, atónito en el cartel, me he quedado a escasos metros de hacer un hijito al autobús con mi turismo (¿Os imagináis el resultado?).

La imagen del autobus era esta


Ha sido entonces cuando mi cabeza se ha puesto a traficar con pensamientos.

En la comunidad valenciana se empezó a privatizar la salud pública hace unos años. De hecho fuimos los inventores de eso que ahora esta tan de moda “servicio público gestionado por un ente privado”, en este caso las empresas Ribera Salud y Asisa. (Estas empresas disponen de un hospital privado en el poligono indutrial de Torrellano, a escasos kilometros del nucleo urbano de Elche).

Me pregunto por que en Madrid la privatización de los hospitales es anticonsitucional y en la comunidad valenciana no. Que rara es esta constitución nuestra. Serán los años, que pasan factura a todos. 

La cosa es que el 28 de Julio del 2010 el señor Francisco Camps (PP), seguro que os suena, vino a inaugurar nuestro nuevo hospital, que llevaba más de dos meses abierto. Acompañado por nuestro entonces alcalde, Alejandro Soler (PSOE). Fue entonces cuando a la mitad de los usuarios de los hospitales de Elche y Elda (vamos, media comarca, unos 150.000 habitantes) nos dijeron algo así como: “Oye, que a partir de ahora, ya no vais al Hospital General, ahora venís al nuevo”. Y además la mitad de los centros de salud de la ciudad pasaron a ser también de gestión privada (esto último no se suele comentar).

En un principio, existía un debate: “¿La calidad de la salud será igual, mejor o peor?”

Yo al inicio estaba a favor y me basaba en lo siguiente:

“- Al menos si un médico es un inepto lo podrán despedir y no pasará como en la 100% pública que como tienen su plaza pues no hay quien los toque.”

Ingenuo de mi.

Con el tiempo, y las experiencias, te das cuenta de que eso no es así. El enchufismo esta de moda y los recortes también. Es como el corte ingles, pero en versión hospital.

En general se nota en el ahorro en pruebas médica, si pueden no sacarte sangre, no te la sacan. Y si pueden ahorrarse tres radiografías, se las ahorran. Y lo peor: compra de material mas barato, con su consecuente bajada de calidad. Os podría contar como tuvieron a mi abuelo tres días con una mascarilla que no cumplía su función. Y como mi abuelo estuvo esos 3 días sin apenas oxigeno en el cerebro y las consecuencias que esto tuvo en é. Pero eso es arena de otro costal.

He aquí cuando yo, pegado al culito del autobus, me hago la siguiente pregunta:

Si la sanidad no es rentable, "¡¿Qué cojones hace mi hospital patrocinando operas?!”


¿No será que en realidad sí que dan pa' ganar dinero?. O ¿es qué el estado da dinero de sobra a la gestión privada?. O, espera, espera, ¿no será qué las gestoras se llevan a clientes de la pública a la privada (Aquí la noticia) para ahorrar listas de espera a los pobrecitos ciudadanos a cambio de unos cientos de euros?. No sé...no lo tengo muy claro.

La cosa es que los ciudadanos tenemos una vía de escape, pedir el traslado a los hospitales que sí que son 100% públicos. Sí, es un derecho, solo tienes que ir a tu centro de salud y solicitar el cambio. Te darán un formulario, tu lo rellenas y a luchar por una sanidad pública, gestionada por el estado.

Y así, y con un poco de suerte, no volveré a correr el riesgo de comerme un autobús en mitad de la calle. 
  


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